La Guardia Civil ha llevado a cabo una operación en Andalucía para investigar las mutilaciones ilegales de perros en las provincias de Almería, Granada, Málaga, Jaén, Córdoba y Sevilla. En total, se han inspeccionado más de 2.000 perros y se han descubierto 1.111 canes presuntamente mutilados ilegalmente por sus propietarios Es importante concienciar a la sociedad sobre la importancia de respetar y proteger a los animales. Las mutilaciones ilegales no solo causan sufrimiento innecesario, sino que también son un acto de crueldad que va en contra de la legislación vigente. La Guardia Civil está comprometida en la lucha contra el maltrato animal y continuará trabajando para garantizar el bienestar de los animales en nuestra sociedad.
En esta operación, ha sido detenido un veterinario de Úbeda (Jaén) como presunto autor de un delito continuado de falsedad documental y otro relativo a la protección de la flora, fauna y animales domésticos por maltrato animal. Este veterinario daba cobertura legal a las mutilaciones que realizaban los rehaleros, anotando en las cartillas sanitarias de los animales «Corte de orejas y rabo por funcionalidad bajo anestesia», sin haber visto a ninguno de estos perros y sin aportar el informe que justificara tales mutilaciones.
Entre las irregularidades detectadas por el Seprona, destacan las incoherencias reflejadas en las cartillas sanitarias, con fechas de intervenciones quirúrgicas que no correspondían con la realidad. Además, se constató que las instalaciones de la clínica veterinaria no estaban preparadas para realizar este tipo de intervenciones con las mínimas garantías.
El corte de orejas y rabos en perros de rehala era una práctica tradicional para evitar daños durante la caza. Sin embargo, esta práctica quedó totalmente prohibida en España desde el 1 de febrero de 2018, cuando entró en vigor la ratificación del Convenio del Consejo de Europa sobre protección de animales de compañía. Están terminantemente prohibidas las mutilaciones de animales realizadas por motivos estéticos o sin utilidad alguna.
El delito de maltrato animal con lesiones está castigado con penas de hasta 18 meses de prisión o multa de hasta 12 meses. Además, se establece la pena de inhabilitación para tenencia, profesión, oficio o comercio que tenga que ver con los animales. Existen también circunstancias agravantes que podrían elevar la pena por encima de los dos años y provocar la entrada en prisión del responsable.
La operación ha sido llevada a cabo por el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil del Destacamento de Sierra Nevada de Granada y de Cazalla de la Sierra de Sevilla.
Es importante concienciar a la sociedad sobre la importancia de respetar y proteger a los animales. Las mutilaciones ilegales no solo causan sufrimiento innecesario, sino que también son un acto de crueldad que va en contra de la legislación vigente. La Guardia Civil está comprometida en la lucha contra el maltrato animal y continuará trabajando para garantizar el bienestar de los animales en nuestra sociedad.
