Chicharrones, Manteca Blanca y Manteca Colorá: una delicia para disfrutar

Chicharrones, Manteca Blanca y Manteca Colorá: una delicia para disfrutar

Descubre cómo preparar los deliciosos chicharrones, la manteca blanca y la manteca colorá, una receta tradicional de nuestra cocina española, paso a paso. Acompáñalos con un buen vino de Jerez y disfruta de esta combinación de sabores intensos. Visita nuestro Recetario para descubrir más deliciosas recetas de nuestra cocina. ¡Buen provecho!

Si eres amante de los sabores intensos y las texturas crujientes, ¡los chicharrones son para ti! Estas delicias fritas y crujientes son un manjar que no puedes dejar de probar. En este artículo, te contaremos todo lo que necesitas saber sobre los chicharrones.

¿Qué son los chicharrones?

Son un platillo tradicional que se encuentra en muchas culturas alrededor del mundo. Consisten en trozos de carne, generalmente de cerdo, que se fríen hasta que quedan dorados y crujientes. La carne se cocina en su propia grasa, lo que le da un sabor intenso y delicioso.

Variedades

Existen diferentes variedades, cada una con su propia particularidad. Algunas de las más populares son:

  • De cerdo: los más comunes, se preparan con la piel del cerdo y su grasa.
  • De pollo: una opción más ligera, se hacen con la piel del pollo.
  • De pescado: una alternativa para los amantes del mar, se elaboran con piel de pescado.

Formas de disfrutarlos

Los chicharrones pueden ser disfrutados de diversas formas. Algunas ideas incluyen:

  • Como aperitivo: acompáñalos con una salsa picante o una guacamole casera.
  • En tacos: rellena tortillas de maíz con chicharrones, cebolla, cilantro y salsa para crear un delicioso taco.
  • En sopa: añade chicharrones a una sopa caliente para darle un toque crujiente.

El deleite crujiente de la Manteca Blanca y Manteca Colorá

Los chicharrones son uno de los bocados más irresistibles de la gastronomía española. Estas deliciosas y crujientes piezas de carne frita son un verdadero placer para los sentidos. Hay diferentes tipos de chicharrones, pero hoy nos centraremos en dos variedades muy populares: los chicharrones de manteca blanca y los chicharrones de manteca colorá.

Chicharrones de Manteca Blanca

Los chicharrones de manteca blanca son una auténtica delicia. Se elaboran con la grasa blanca del cerdo, que se funde y se fríe hasta obtener una textura crujiente y dorada. Estos chicharrones son perfectos para disfrutar como aperitivo o como acompañamiento de platos principales.

La manteca blanca utilizada para hacer estos chicharrones es conocida por su sabor suave y delicado. Al freírse, adquiere una textura crujiente por fuera y tierna por dentro. El resultado es un bocado irresistible que combina lo mejor de la carne de cerdo con la exquisitez de la fritura.

Chicharrones de Manteca Colorá

Los chicharrones de manteca colorá son una variante más intensa y sabrosa. En lugar de utilizar la grasa blanca del cerdo, se emplea la manteca de cerdo coloreada con especias y pimentón. Esto le da a los chicharrones un sabor más intenso y un color rojizo característico.

La manteca colorá utilizada en estos chicharrones aporta un sabor ahumado y picante que los hace realmente irresistibles. Son perfectos para aquellos que buscan un toque de intensidad en su picoteo. Además, su textura crujiente los convierte en una opción ideal para disfrutar en cualquier momento.

Receta

Hoy en El Recetario, te traemos una receta tradicional y sabrosa: los Chicharrones, la Manteca Blanca y la Manteca Colorá. Si eres amante de la cocina española, seguramente ya estás salivando. ¡Prepárate para disfrutar de un verdadero manjar!

Ingredientes

  • 4 kg de falda de cerdo ibérico
  • 1 kg de pella
  • Dientes de ajos enteros (4 o 5 cabezas)
  • Sal
  • Laurel (unas 10 hojas)
  • Comino y orégano al gusto

Preparación

Comenzamos por trocear en pedazos la falda de cerdo y la pella, teniendo en cuenta que disminuirán de tamaño durante la cocción. En un perol, mezclamos todos los ingredientes y añadimos medio vaso de agua para empezar a hervir en el fuego.

Freímos los trozos de carne en su propia grasa, moviéndolos de vez en cuando para asegurarnos de que se cocinen de manera uniforme. Cuando los trozos de falda estén bien dorados y crujientes, los apartamos y vamos retirando el caldo del perol poco a poco en otro recipiente. Este caldo es la manteca, que puede ser blanca o colorá si le añades pimentón.

¡Y ahora sí, a disfrutar! Los chicharrones, la manteca blanca y la manteca colorá son un verdadero festín para el paladar. Puedes acompañarlos con un buen vino de Jerez para realzar aún más su sabor. No hay duda de que esta receta te dejará con ganas de repetir.

Esperamos que te haya gustado esta receta tradicional española. Si quieres descubrir más delicias culinarias, no dudes en visitar nuestro Recetario. ¡Buen provecho!

¿Te ha gustado este artículo? ¡Pues no te pierdas ni uno! Suscríbete gratis a nuestras actualizaciones y recibe en tu móvil toooodo lo nuevo. Un solo clic y ¡tachán! Estás a la última.