
Agentes de la Policía Nacional han llevado a cabo una importante Operación en la nube, deteniendo a 35 personas en 21 provincias españolas (Madrid, Barcelona, Valencia, Málaga, Cádiz…). La investigación, que comenzó gracias a un aviso ciudadano, ha permitido desarticular una red dedicada al almacenamiento e intercambio de pornografía infantil a través de servicios en la nube y mensajería instantánea. Además de los arrestos, se está investigando a otras siete personas en relación con estos hechos.
Amplia red desarticulada
El punto de partida de la investigación fue un correo alertando sobre un posible enlace con imágenes ilícitas. La colaboración de empresas dedicadas al almacenamiento masivo en la nube, junto con el trabajo de análisis de los investigadores, fue fundamental para identificar a las personas presuntamente implicadas en la descarga de este material. Los detenidos están distribuidos por buena parte del territorio nacional, incluyendo provincias como Madrid, Barcelona, Valencia, Málaga o Cádiz. En algunos casos, los implicados utilizaban múltiples cuentas y dispositivos para ocultar su actividad.
Registros y material incautado
Como parte de esta Operación en la nube, se han realizado un total de 42 registros domiciliarios. En ellos, los agentes han intervenido una gran cantidad de dispositivos de almacenamiento, sumando un total de 112. Entre el material incautado se encuentran discos duros, tarjetas de memoria, memorias USB, teléfonos móviles, ordenadores portátiles y de sobremesa, e incluso consolas de videojuegos que estaban siendo utilizadas para guardar este tipo de contenido. La cantidad de material ilícito almacenado en algunos de estos dispositivos era considerable, llegando a terabytes de información en la nube.
Colaboración clave contra el delito
Uno de los aspectos más preocupantes de esta investigación ha sido el descubrimiento de posibles agresiones sexuales a menores. A raíz de la detención de uno de los implicados, se pudo comprobar que presuntamente habría participado en la agresión a dos niñas de corta edad. Este hallazgo subraya la gravedad de este tipo de delitos y la importancia de la labor policial para proteger a los más vulnerables. La Operación en la nube destaca la eficacia de la colaboración entre las fuerzas de seguridad y las empresas tecnológicas en la lucha contra la ciberdelincuencia y la explotación sexual infantil. Combatir estas redes es una prioridad para garantizar la seguridad de los menores en el entorno digital.