¡La calle Campana te espera! Olvídate del peligro y sumérgete en el nuevo ambiente seguro y acogedor de esta vía, ahora más viva que nunca. Descubre cómo esta icónica calle ha renacido y vuelve a ser un lugar para disfrutar.
Tras años de ser un fantasma que acechaba a los vecinos de Jerez de la Frontera, la finca ruinosa de la calle Campana 39 está a punto de desaparecer. Y no, no se trata de un truco de magia, sino de una intervención municipal que ha puesto fin a una pesadilla que duraba desde 2017.
Imagínense esta casa como un paciente en coma, un peligro para sí misma y para quienes la rodeaban. Por eso, el Ayuntamiento, como un buen médico, ha decidido intervenir y extirpar la parte más enferma del edificio. Con un presupuesto de 26.101,59 euros, los operarios de Juan Romo S.L. están trabajando a destajo para dejar la zona como los chorros del oro.
Más que una demolición, una liberación
La obra no se limita a tirar abajo lo que ya estaba cayéndose a pedazos. Una vez que la casa haya pasado por el quirófano, se procederá a una limpieza a fondo, como si de una habitación de hospital se tratara. Los escombros serán retirados, los huecos tapiados y se levantará un muro para que nadie pueda volver a entrar en la zona de peligro.
Pero la historia no acaba aquí. Los técnicos municipales quieren asegurarse de que esta parcela no se convierta en un solar baldío y sin futuro. Por eso, realizarán un estudio para ver si la finca tiene algún valor histórico o arquitectónico. Si es así, se buscará la forma de conservarlo y rehabilitar lo que se pueda.
Una calle renacida
Y lo mejor de todo es que, una vez finalicen las obras, la calle Campana volverá a la vida. Los vecinos podrán volver a pasear por la zona sin miedo a que les caiga algo en la cabeza. El tráfico, que llevaba años restringido, también se recuperará. ¡Por fin podremos decir adiós a los atascos y a las vueltas por otros caminos!
Un largo camino hasta aquí
Como suele ocurrir en estas historias, la solución no ha sido rápida ni sencilla. El Ayuntamiento tuvo que luchar contra la burocracia y los trámites judiciales para poder entrar en la finca y comenzar las obras. Pero, gracias a la perseverancia de los técnicos municipales y a la presión de los vecinos, finalmente se ha logrado dar un paso adelante.
Un futuro prometedor
Esta intervención no solo es una victoria para los vecinos de la calle Campana, sino también un ejemplo de cómo la administración puede actuar de forma rápida y eficaz cuando se trata de garantizar la seguridad de los ciudadanos. Esperemos que esta experiencia sirva de lección para el futuro y que otras fincas en ruinas puedan ser rehabilitadas o demolidas antes de que se conviertan en un peligro para todos.
Datos clave
- Superficie de la parcela: 351,00 metros cuadrados
- Volumen demolido: 401,48 metros cúbicos
- Presupuesto: 26.101,59 euros
- Duración de las obras: (A determinar en función del avance de los trabajos)
¡Y colorín colorado, esta historia aún no ha terminado!