Un documento inédito desvela la visita de Hans Christian Andersen a Cádiz en 1862. Sumérgete en la historia y conoce los detalles de su estancia en la ciudad, gracias a los archivos históricos #AndersenEnCádiz.

¡Viaja en el tiempo! Un nuevo hallazgo nos transporta a 1862, cuando Hans Christian Andersen visitó Cádiz

El mundo de la literatura infantil está repleto de nombres que evocan magia, fantasía y enseñanzas atemporales. Uno de esos nombres, sin duda, es el de Hans Christian Andersen, el célebre autor danés que dio vida a personajes tan entrañables como la Sirenita, el Patito Feo o la Reina de las Nieves. Pero, ¿qué conexión podría existir entre este autor universal y la ciudad de Cádiz? La respuesta, sorprendente y fascinante, se encuentra resguardada entre los muros del Archivo Histórico Provincial de Cádiz.

Gracias a la meticulosa labor de conservación y catalogación que se realiza en este archivo, se ha podido rescatar un valioso documento que certifica el paso de Andersen por la ciudad gaditana en el año 1862. Un hallazgo que nos permite reconstruir un fragmento poco conocido de la vida de este escritor y que nos invita a imaginar su encuentro con una ciudad vibrante y llena de historia.

Desde Tánger hasta Madrid, con escala en Cádiz

Según consta en el Registro de Refrendos que se conserva en el Archivo Histórico Provincial de Cádiz, Hans Christian Andersen desembarcó en el puerto de Cádiz el 11 de noviembre de 1862, procedente de Tánger. Su pasaporte, expedido en Copenhague, revelaba que su destino final era Madrid. Este documento, una joya para los estudiosos de la vida de Andersen, nos proporciona una prueba irrefutable de su presencia en la ciudad.

Hans Christian Andersen
Foto: Archivo Histórico Provincial de Cádiz
Hans Christian Andersen
Foto: Archivo Histórico Provincial de Cádiz

La información contenida en el registro nos ofrece una ventana al pasado, permitiéndonos visualizar al escritor danés llegando a las costas gaditanas en un momento histórico particular. Cádiz, en el siglo XIX, era una ciudad portuaria bulliciosa, un crisol de culturas y un punto estratégico en las rutas comerciales. Imaginemos a Andersen, un hombre sensible y observador, recorriendo sus calles, impregnándose de su ambiente y quizás encontrando inspiración en sus gentes y paisajes.

La Fonda de París: un refugio para el viajero

El registro del Archivo Histórico Provincial de Cádiz también revela el lugar donde se hospedó Andersen durante su breve estancia en la ciudad: la Fonda de París (actual Hostal Las Cortes). Este establecimiento, seguramente un lugar de encuentro para viajeros y comerciantes, nos permite reconstruir una imagen más completa de la experiencia gaditana del escritor. Podemos imaginarle en el bullicio de la fonda, conversando con otros huéspedes, escribiendo en su cuaderno de viaje o simplemente observando el ir y venir de la vida cotidiana.

La elección de la Fonda de París como lugar de alojamiento no es un dato menor. En el siglo XIX, las fondas eran mucho más que simples hospedajes; eran centros sociales donde se intercambiaban noticias, se cerraban negocios y se tejían redes de contactos. Es probable que Andersen, un hombre curioso y sociable, aprovechara su estancia en la fonda para interactuar con personas de diversas procedencias, enriqueciendo así su visión del mundo.

Un legado que trasciende el tiempo

El hallazgo de este registro en el Archivo Histórico Provincial de Cádiz no solo confirma la presencia de Andersen en la ciudad, sino que también nos invita a reflexionar sobre la importancia de la conservación del patrimonio documental. Gracias a la labor de los archiveros, se preservan documentos que nos conectan con el pasado, que nos permiten reconstruir la historia y que nos ofrecen nuevas perspectivas sobre personajes y acontecimientos.

La visita de Hans Christian Andersen a Cádiz, aunque breve, deja una huella imborrable en la historia de la ciudad. Un fantasma literario que recorrió sus calles, respiró su aire y dejó una pequeña parte de su legado entre sus muros. Un legado que hoy, gracias al Archivo Histórico Provincial de Cádiz, podemos redescubrir y celebrar, especialmente en fechas tan significativas como el 2 de abril, el Día Internacional del Libro Infantil y Juvenil #dialibroinfantil.

Este descubrimiento nos anima a seguir investigando y explorando los archivos, verdaderos tesoros de la memoria colectiva. Quién sabe qué otras sorpresas nos aguardan entre sus legajos, qué otras historias esperan ser contadas. La visita de Andersen a Cádiz es un recordatorio de que la historia está viva, que se construye día a día y que se preserva gracias al trabajo incansable de instituciones como el Archivo Histórico Provincial de Cádiz, guardianes de nuestro pasado y faros que iluminan nuestro presente.

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