¡Alto! ¡La caza descontrolada en Andalucía tiene los días contados! La Junta toma cartas en el asunto y limita piezas por cazador. ¡Es hora de que la caza sea más justa y sostenible!

Andalucía ha dado un paso significativo hacia una gestión más segura y sostenible de la caza con la aprobación de un nuevo decreto que regula las condiciones sanitarias de la carne de caza destinada al consumo humano. Esta normativa, que actualiza y adapta la legislación andaluza a los estándares europeos, busca garantizar la seguridad alimentaria y promover prácticas cinegéticas más responsables.

Principales novedades del decreto

El nuevo decreto introduce una serie de novedades relevantes que impactarán directamente en el sector cinegético andaluz:

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Centros de recogida de caza: La creación de estos establecimientos permitirá una mejor gestión de las piezas de caza, garantizando su almacenamiento en condiciones óptimas y facilitando su posterior traslado a los establecimientos de manipulación.

Limitación de piezas por cazador: Con el objetivo de fomentar prácticas cinegéticas más sostenibles, se establece un límite de dos piezas por cazador, coto y día.

Formación de guardas de coto: Los guardas de coto adquieren un papel más relevante al ser considerados personas cazadoras formadas.

Simplificación de la formación veterinaria: Se simplifica la formación requerida para los veterinarios autorizados en actividades cinegéticas, centrándose en aquellos conocimientos que aportan un mayor valor añadido.

Análisis obligatorio de triquina: Para garantizar la seguridad alimentaria, se establece la obligatoriedad de realizar análisis de triquina en todas las especies sensibles antes de su consumo.

Flexibilidad en el envío de piezas de caza: Se permite el envío de piezas de caza a cotos no colindantes para la realización del primer examen, siempre y cuando se trate de caza social.

Tramitación electrónica: La nueva normativa se adapta a los estándares de la administración electrónica, simplificando los trámites y agilizando los procesos.

Un paso hacia la seguridad alimentaria y la sostenibilidad

La aprobación de este decreto refleja el compromiso de la Junta de Andalucía por garantizar la seguridad alimentaria y promover prácticas cinegéticas responsables. Al establecer requisitos sanitarios más estrictos y fomentar la trazabilidad de las piezas de caza, se contribuye a proteger la salud pública y a preservar los recursos naturales.

Además, la creación de los centros de recogida de caza representa un avance significativo en la organización del sector, al permitir una mejor gestión de las piezas y facilitar su comercialización.

Impacto en el sector cinegético

El nuevo decreto tendrá un impacto directo en el sector cinegético andaluz. Por un lado, supondrá una adaptación a nuevas exigencias normativas para los cazadores, los cotos y los establecimientos de manipulación de caza. Por otro lado, ofrecerá nuevas oportunidades de negocio, como la creación de centros de recogida de caza.

Desafíos y oportunidades

La implementación de este decreto plantea desafíos y oportunidades. Será necesario informar y formar a todos los agentes implicados en la cadena alimentaria de la caza para garantizar el cumplimiento de las nuevas normas. Además, se requerirá una inversión en infraestructuras y equipamiento para adecuar los establecimientos a los nuevos requisitos.

Sin embargo, esta nueva normativa también abre la puerta a una mayor profesionalización del sector cinegético, a una mejora de la imagen de la caza y a un aprovechamiento más sostenible de los recursos naturales.

Conclusión

El nuevo decreto sobre las condiciones sanitarias de la carne de caza en Andalucía representa un hito en la gestión de esta actividad en la región. Al adaptar la normativa a los estándares europeos y establecer requisitos sanitarios más estrictos, se contribuye a garantizar la seguridad alimentaria y a promover prácticas cinegéticas más responsables.

Esta normativa, que combina la tradición cinegética con las exigencias de la modernidad, marca un camino hacia un futuro más sostenible para el sector cinegético andaluz.

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