
Una inquietante situación familiar ha sido destapada en la localidad de Fitoria, perteneciente al municipio de Oviedo, en Asturias. Las autoridades han confirmado el descubrimiento de 3 menores que, al parecer, llevaban años viviendo encerrados en su propio hogar. Se trata de dos hermanos gemelos de ocho años y un niño de diez, quienes según los primeros indicios, permanecían en la vivienda desde diciembre de 2021. La descripción de las condiciones en las que se encontraban es desoladora: sin recibir educación formal, privados de contacto con el exterior y residiendo en un entorno descrito como insalubre, con la presencia de excrementos y animales enfermos.
La alarma vecinal
La cadena de eventos que llevó a este descubrimiento comenzó con la perseverancia y la sospecha de una vecina de la familia. Esta mujer notaba detalles inusuales que despertaban su inquietud. A pesar de escuchar ocasionalmente ruidos o voces que parecían de niños, nunca los veía fuera de la vivienda, ni siquiera en el jardín. Esta ausencia prolongada, sumada a la convicción de que no asistían a ningún centro escolar, alimentó sus recelos y la llevaron a pensar que algo no estaba bien en ese domicilio.
La crucial notificación
Otro factor que llamó la atención de la vecina eran las repetidas y a veces voluminosas entregas de comida a domicilio que el hombre, aparentemente el padre, recogía en la puerta. Parecían pedidos desproporcionados para una sola persona, reforzando la idea de que había más gente dentro de la casa. Impulsada por la gravedad de sus sospechas, decidió dar un paso crucial y alertó formalmente al Servicio de Familia e Infancia del Ayuntamiento de Oviedo. Fue esa comunicación la que puso en marcha toda la maquinaria de protección.
La intervención y el después
Esta notificación activó de inmediato a las fuerzas de seguridad. Tras las verificaciones pertinentes, la Guardia Civil procedió a la intervención en el domicilio, confirmando las peores sospechas sobre las condiciones de vida de los menores. El matrimonio residente en la vivienda fue detenido el pasado lunes, pasando a disposición judicial tras una noche en dependencias policiales. Lo más importante en este delicado caso es que los tres niños, un chico de diez años y dos gemelos de ocho, ya han sido puestos bajo la protección de la administración del Principado de Asturias y se encuentran acogidos en un centro adecuado, lejos del aislamiento y las condiciones precarias en las que vivían, a la espera de que su situación legal y personal se resuelva.
Foto de la cabecera: imagen de archivo © @guardiacivil