Descubre el vínculo de mayorazgo fundado en 1469 por Álvar Núñez Cabeza de Vaca de Jerez, caballero 24, y cómo su conexión con el Almirante D. Fadrique y el Obispo de León cimentó el patrimonio de una de las familias más influyentes de la nobleza jerezana, ancestros del célebre explorador.

El poderoso mayorazgo de un caballero veinticuatro

El 9 de noviembre de 1469, en un momento crucial de la historia de Castilla, un caballero veinticuatro de Jerez, de nombre Álvar Núñez Cabeza de Vaca, ejecutó un acto de gran trascendencia social y económica: la fundación de un mayorazgo. Este tipo de actos eran la piedra angular del poder de la nobleza en la Baja Edad Media.

El documento, una joya del Archivo Municipal, detalla cómo este Álvar Núñez vincula bienes de considerable valor a su hijo, Fernán Ruiz Cabeza de Vaca, cimentando así la riqueza e influencia de su linaje en la campiña y el alfoz jerezano. Esta acción legal no solo habla de la previsión de un padre, sino también de las poderosas conexiones de la familia.

Lazos con la alta nobleza de Castilla

La solidez del patrimonio de Álvar Núñez Cabeza de Vaca de Jerez se basaba en sus vínculos directos con algunas de las figuras más importantes del reino. El vínculo incluía dos propiedades clave que cimentaban su estatus:

  1. La Dehesa y la Torre de Giuza: Esta propiedad le fue otorgada por vía de mayorazgo por su primo, D. Fadrique, Almirante Mayor de Castilla. Se trata de Fadrique Enríquez de Mendoza (c. 1399-1473), el II Almirante de Castilla, Conde de Melgar y una de las figuras políticas más influyentes de su tiempo, padre de Juana Enríquez (reina de Aragón y madre de Fernando el Católico). Una merced de este Almirante subraya la altísima posición social de la familia jerezana.
  2. La Mitad de Casas y Tierras en Espartina, en la Torre de Pedro Vázquez: Estos bienes procedían de una donación de su tío, D. Pedro de Vaca, Obispo de León. Este lazo con la jerarquía eclesiástica, que también disfrutaba de un inmenso poder territorial y económico, evidencia la red de influencias que protegía y expandía el patrimonio de los Cabeza de Vaca.

La sombra del gran explorador

Aunque el fundador del vínculo en 1469, Álvar Núñez Cabeza de Vaca de Jerez, fue un caballero local, su nombre resuena poderosamente en la historia universal. La genealogía de la Casa de Cabeza de Vaca de Jerez es notable, y este caballero es, sin duda, un ascendiente directo del celebérrimo Álvar Núñez Cabeza de Vaca (nacido c. 1488-1490), el explorador de La Florida y autor de los Naufragios.

Es fascinante observar cómo el poder y estabilidad económica asegurados por actos como este mayorazgo, otorgado a Fernán Ruiz Cabeza de Vaca, sentaron las bases para que generaciones posteriores pudieran aspirar a empresas de mayor calado, como la aventura americana. La familia, arraigada en Jerez desde la Reconquista, mantuvo su protagonismo a través del servicio a la Corona y la acumulación de bienes, como atestigua este documento histórico de 1469.

El estudio de este mayorazgo permite a los jerezanos y a los historiadores rastrear el origen de una estirpe que dio a la ciudad y a España a uno de sus exploradores más legendarios.

Únete a nuestra comunidad 🚀 y no te pierdas nada. Sé el primero en conocer nuestras noticias y novedades directamente en tu móvil o bandeja de entrada. ¡Te esperamos! 🤩