
Sumérgete en la Historia Milenaria de Jerez, desde sus orígenes medievales hasta las fascinantes huellas de civilizaciones antiguas. Exploraremos el impacto romano y el significativo yacimiento de Mesas de Asta.
La ciudad de Jerez, formalmente conocida como Jerez de la Frontera desde el año 1380, tiene sus cimientos firmemente asentados en la época medieval. No obstante, si viajamos aún más atrás en el tiempo, descubrimos indicios de actividad humana en esta región desde la más remota antigüedad. La Historia Milenaria de Jerez se extiende mucho más allá de lo que a menudo imaginamos.
Durante el dominio musulmán, la urbe era identificada como Sharish Saduna. Fue bajo el reinado de Juan I
cuando recibió el distintivo apelativo «de la Frontera». Esta denominación resalta su crucial posicionamiento geográfico, actuando como un punto de encuentro y división entre el reino de Castilla y el reino de Granada. Esta ubicación estratégica moldeó gran parte de su desarrollo.
El término municipal de Jerez abarca una vasta extensión de 1189 kilómetros cuadrados, situándose en la margen izquierda del río Guadalete. Dicha amplitud lo convierte en uno de los municipios más extensos de España. Esta vasta superficie alberga una diversidad de entornos naturales, que van desde la productiva campiña jerezana hasta las marismas y las estribaciones de la sierra. Cada rincón ofrece una perspectiva única de la riqueza natural de la zona.
La huella romana en el corazón de la campiña
En lo que respecta a su pasado remoto, Jerez experimentó una profunda romanización. A escasos kilómetros del núcleo urbano se localiza el yacimiento arqueológico de Mesas de Asta. Este lugar, que en la antigüedad fue la importante ciudad romana de Asta Regia, representa el enclave arqueológico de mayor relevancia dentro del término municipal. Es una clara evidencia de la intensa influencia romana en la región y un pilar fundamental para entender la Historia Milenaria de Jerez. Los restos encontrados en este sitio proporcionan valiosa información sobre la vida y las costumbres de sus antiguos habitantes.
Así, aunque la Jerez que conocemos hoy tenga un innegable origen medieval, su narrativa histórica se prolonga considerablemente hacia el pasado. Vestigios de civilizaciones ancestrales han dejado una impronta indeleble en esta cautivadora ciudad. Sumergirse en su pasado es adentrarse en un fascinante tapiz de culturas y épocas que han configurado lo que es Jerez en la actualidad. La Historia Milenaria de Jerez sigue revelando secretos con cada nueva excavación y estudio.