Nos llega una noticia preocupante sobre grabaciones ilegales en Jerez. La Policía Nacional ha imputado a un joven de 22 años. Se le relaciona con grabaciones a menores en baños de centros comerciales y también a mujeres adultas en sus domicilios. Es un tema serio que investiga ahora la justicia y que ha destapado una realidad inquietante.

La denuncia que inició todo

Todo comenzó a raíz de una joven de 14 años en un centro comercial de Jerez de la Frontera. Ella se dio cuenta de que estaba siendo grabada mientras estaba en el baño de mujeres. Lógicamente atemorizada, pidió ayuda a la persona de la limpieza, quien rápidamente entendió lo que estaba ocurriendo. Esta trabajadora dio el aviso a la seguridad del centro y a la Policía Nacional. Una rápida y crucial reacción ante una situación tan delicada.

La intervención policial y la incautación

Los vigilantes de seguridad del centro y los agentes de la Policía Nacional actuaron con prontitud. Localizaron a un hombre dentro de uno de los retretes del mismo baño de mujeres. Tenía su móvil en el suelo, grabando hacia el compartimento de al lado. Sus explicaciones no convencieron a los agentes, que procedieron a identificarle y a incautar el teléfono, considerándolo una prueba fundamental. También contactaron con los padres de la menor afectada para informarles.

El análisis del móvil revela más víctimas

La investigación pasó al Grupo de Delitos Informáticos de la Comisaría de Jerez. Con permiso judicial, analizaron el contenido del teléfono y descubrieron que no era un hecho aislado. El imputado habría realizado grabaciones ilegales similares a otras mujeres en servicios públicos de Jerez. Pero lo más grave es que también grababa a mujeres en sus propios domicilios. Para ello, se subía a azoteas y tejados, usando el zoom del móvil para grabar a través de las ventanas de pisos altos, intentando pasar desapercibido. Este análisis fue clave para descubrir la magnitud de los hechos.

Los agentes lograron identificar a una segunda víctima menor, de 15 años, informando a sus padres. Además, localizaron a las otras dos vecinas que fueron grabadas en sus casas. En total, se han identificado cuatro víctimas directas a raíz de este caso, aunque el análisis reveló muchas más grabaciones. Todas las víctimas identificadas fueron informadas de la situación y expresaron su comprensible malestar y sorpresa. Han manifestado su intención de personarse en la causa judicial abierta, que ahora lleva el Juzgado de Instrucción Nº 3 de Jerez, quien ha tomado medidas cautelares respecto al imputado mientras avanza el proceso.

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