César Pérez Pacheco
Los premios Andalucía de Medio Ambiente 2024 despiertan la indignación por premiar a empresas con nulo compromiso con el medio ambiente.
Premiando la hipocresía: los XXVIII Premios Andalucía de Medio Ambiente
La Junta de Andalucía ha vuelto a generar controversia con la reciente entrega de los XXVIII Premios Andalucía de Medio Ambiente (PAMA 2024). Ecologistas en Acción acusan a la institución de premiar a empresas con un historial cuestionable en materia ambiental, ignorando a verdaderos defensores del medio ambiente en la región.
Según los ecologistas en el caso de FCC, la empresa galardonada con el premio «Economía Circular», sus fábricas y vertederos emiten 6 millones de toneladas de CO2. Más aún, la empresa pública «Básica», con un proyecto de economía circular en marcha, fue excluida del reconocimiento.
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Coca-Cola, otra empresa premiada en la categoría «Cambio Climático», es conocida por bloquear iniciativas de devolución de envases y fomentar el consumismo excesivo con consecuencias negativas para el medio ambiente.
Esta tendencia de premiar a empresas con un impacto ambiental negativo se viene repitiendo en los últimos años, con ganadores como Iberdrola, Cepsa, y Autoridad Portuaria de Sevilla.
Un jurado sin expertos: ¿intereses ocultos?
La composición del jurado, integrado únicamente por representantes de la Administración andaluza y empresas privadas, levanta sospechas sobre la transparencia y objetividad de los premios. La ausencia de expertos independientes en medio ambiente en el jurado es particularmente preocupante.
La falta de rigor en la selección de los premiados y la ausencia de participación del mundo académico y la sociedad civil en la toma de decisiones ponen en entredicho la credibilidad de estos premios.
Una encrucijada para la Junta de Medio Ambiente
La Consejería de Medio Ambiente tiene dos opciones:
- Restaurar el rigor y la participación en estos premios: Abrir la convocatoria a un jurado independiente con expertos en medio ambiente y la sociedad civil para garantizar la transparencia y la selección de verdaderos defensores del medio ambiente.
- Suprimir los premios: Si no se pueden garantizar la transparencia y la seriedad en la selección de los premiados, lo más responsable sería eliminar unos premios que han perdido su significado y credibilidad.
La decisión final recae en la Junta de Andalucía. La comunidad espera que se tomen medidas para corregir el rumbo y que los premios Andalucía de Medio Ambiente vuelvan a ser un verdadero reconocimiento a la labor de quienes trabajan por proteger nuestro planeta.
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