Persecuciones, choques y ebrios al volante: La Policía Local detiene a cinco conductores en Jerez por graves delitos contra la Seguridad Vial

La irresponsabilidad al volante ha vuelto a sembrar la alarma y la indignación en las calles de Jerez de la Frontera. La Policía Local ha tenido que intervenir de manera contundente en los últimos días, saldando su actuación con cinco detenidos por seguridad vial en Jerez por poner en riesgo la vida de todos los ciudadanos. Es incomprensible y sumamente indignante que, a pesar de las campañas de concienciación y las duras penas, haya conductores que sigan desafiando la ley bajo los efectos del alcohol o circulando sin la documentación básica para ello. ¿Hasta cuándo tendremos que tolerar esta impunidad?

Delitos contra la seguridad vial: Un mosaico de imprudencias que pone en jaque a Jerez

Los controles preventivos son, a todas luces, necesarios, y la casuística de las detenciones clama al cielo. Uno de los primeros detenidos por seguridad vial en Jerez fue sorprendido en los accesos al centro con una tasa de alcohol que excedía con creces lo permitido. ¡Un peligro público en pleno casco urbano! A esto se suma el caso de un conductor de ciclomotor que, en una avenida central, fue denunciado por carecer ¡completamente! del permiso de circulación. La barra libre de imprudencia parece no tener fin ni respeto por la vida ajena. Otro positivo por alcoholemia, detectado cerca del Parque González Hontoria, confirmó en la prueba que superaba ampliamente la tasa, demostrando un desprecio total por las normas de convivencia y seguridad. ¿Es que la vida de los demás no vale nada?

Fuga criminal: Ebrio, chocando y destrozando el mobiliario público

Pero el colmo de la imprudencia y la falta de civismo se vivió en el entorno del Paseo de las Delicias. Un individuo que rebasó un semáforo en rojo delante de una patrulla policial desató una persecución propia de una película, pero con consecuencias reales y graves. Lejos de acatar la ley, el infractor emprendió una huida temeraria que solo terminó al colisionar violentamente contra un vehículo estacionado y una señal de tráfico. Fue inmediatamente detenido por la Policía Local, por supuesto, y al ser sometido al test de alcoholemia, ofreció resultado positivo. Es decir, ebrio, huyendo y provocando daños materiales, poniendo en serio riesgo a peatones y otros conductores. Este tipo de actos criminales justifican la dureza extrema de la actuación policial y un castigo ejemplar.

Otro de los detenidos por seguridad vial en Jerez fue interceptado en una céntrica calle por su conducción errática en motocicleta, teniendo que intervenir incluso una unidad de Policía Nacional para asegurar su detención. Al igual que en los demás casos, el filiado dio positivo en el test de alcoholemia. El vehículo fue trasladado al depósito, donde debería quedarse por una larga temporada.

Los datos de los controles son un reflejo de esta triste realidad. En dos operativos de alcoholemia, con un total de 62 pruebas realizadas, se registraron tres positivos. Uno de los detenidos por seguridad vial en Jerez, el motorista de la céntrica calle, deberá responder por un delito que vulnera el artículo 379.2 del Código Penal. A esto hay que sumarle tres denuncias por carecer de Seguro Obligatorio y otra por conducir con la ITV caducada. Es hora de que se aplique toda la firmeza de la ley contra estos irresponsables que convierten las carreteras en zonas de alto riesgo.