El pasado 28 de abril, una fecha marcada por el gran apagón que afectó a la ciudad y a toda la Península Ibérica, se produjo un desafortunado incidente en el IES Alvar Núñez. Según ha trascendido, el director del centro sufrió una agresión en las instalaciones educativas. Este suceso, ocurrido en un momento de dificultad generalizada por la falta de suministro eléctrico, pone de manifiesto la vulnerabilidad que a veces enfrentan los profesionales de la educación. La noticia de la Agresión Director IES Jerez durante aquel día ya está siendo investigada por las autoridades competentes tras la correspondiente denuncia.

Lo ocurrido durante el apagón

Los hechos tuvieron lugar en pleno día del apagón. La ausencia de electricidad complicó la situación, afectando directamente a la posibilidad de comunicación. Tras la agresión sufrida, el director se vio impedido de contactar de manera inmediata con los servicios de emergencia o reportar lo sucedido debido a las dificultades en las telecomunicaciones. Este detalle subraya el contexto extraordinario en el que se produjo el incidente, añadiendo una capa de complejidad al momento de reaccionar y buscar ayuda.

La denuncia y los testigos

A pesar de las adversidades iniciales para comunicarse, el suceso no quedó sin consecuencias. La agresión ha sido formalmente denunciada ante la Policía Nacional, que ya ha iniciado una investigación para esclarecer los hechos y depurar responsabilidades. Es importante destacar que, según la información disponible, varios padres que se encontraban presentes en el centro en el momento del incidente fueron testigos de lo ocurrido. Estos testigos estarían dispuestos a colaborar con las autoridades y testificar sobre lo que presenciaron, un factor clave para el avance de la investigación policial.

Protocolos activados

Más allá de la vía policial, el director del IES Alvar Núñez ha llevado el conocimiento de este grave episodio a las instancias educativas pertinentes. Ha informado a la Inspección Educativa, así como a la asesoría jurídica de la Consejería de Desarrollo Educativo y FP y a la secretaría general. Desde la delegación territorial correspondiente, se ha comunicado que el servicio de inspección activó de forma inmediata el protocolo específico contemplado para los casos de agresión al profesorado. Este protocolo se basa en la Orden del 20 de junio de 2011 y busca dar una respuesta institucional y de apoyo a los profesionales afectados por este tipo de situaciones en el ámbito educativo. La activación de este protocolo demuestra el respaldo de la administración educativa ante incidentes que comprometen la seguridad y el bienestar del personal docente y directivo en los centros. La comunidad educativa en general sigue con atención el desarrollo de los acontecimientos y la resolución de este desafortunado suceso.

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